domingo, 17 de marzo de 2013

Anagennese a la venta en Amazon

Bueno, nos ha llevado años conseguirlo y para hacerlo hemos tenido que mandar todo al diablo y arremangarnos, pero finalmente aquí está lo prometido: la edición impresa de la segunda entrega de Los hijos de Gea, Anagennese, está a la venta en Amazon a un precio de 15, 92 Euros.

Los que estéis al otro lado del Atlántico o fuera de España tendréis esta vez la posibilidad de conseguirla, ya que también está a la venta en Amazon.com a un precio de 21 Dólares.
En breve, publicaremos también el ebook para kindle, por lo que los que hayáis sucumbido a la tecnología también podréis tener acceso a él.

Después de tanto tiempo me parece mentira haber llegado aquí. Sólo me queda esperar a que el libro vaya llegando a vuestras manos, y a que volváis a mi con vuestras impresiones. Mientras espero, supongo que sería una buena idea ir adelantando el tercero. =)

¡Disfrutadlo!

ANAGENNESE en Amazon.es

ANAGENNESE en Amazon.com

jueves, 14 de marzo de 2013

Reflexiones en la nieve: La desgracia del Carpe diem

Son curiosas las reflexiones que una hace mientras camina bajo una nevada con ventisca incluida. Mientras intentaba que la nieve no se colase en mis ojos me puse a reflexionar sobre lo que concluí como una de las grandes desgracias para nuestra raza: el filósofo que inventó el "Carpe diem". Esas dos palabras que a la gente le encanta pronunciar porque suena "cool" podrían resumir perfectamente la causa de todos los males actuales: calentamiento global, la crisis de la economía capitalista...
La tierra siempre ha tenido y tendrá eras glaciares y eras de deshielo, eso es inevitable y por lo tanto no es algo que los humanos estemos provocando. Sin embargo sí creo que estamos acelerando el proceso. Pero como sabiamente dijo George Carlin refiriéndose al malgastado slogan "Salvemos el planeta", al planeta no le va a pasar nada, ¡nosotros estamos jod...s! (Perdón por la palabra, pero hay ocasiones en las que ese tipo de palabras son las más adecuadas debido a la fuerza que contienen).
La crisis es algo con lo que los españoles estamos aprendiendo a lidiar en los últimos años... una vez más. Todos tenemos claro a quién apuntar con el dedo. En parte, también nosotros hemos sido culpables por dejarnos llevar, manipular, desculturizar e idiotizar, pero está claro que en este momento a algunos les está saliendo muy rentable la crisis. A los de siempre, a los que se meten el dinero a la saca.

Total, no quiero hablar de la crisis, sino de la conclusión, como os contaba, de que las gracias se las podemos dar al ingenioso creador del "Carpe diem". Disfruta el momento y a los demás que les dén.
Por decenas, cientos de años a nadie le ha importado el calentamiento global porque los billetes en el bolsillo calentaban su cuerpo lo suficiente. No nos equivoquemos, todavía no les importa a la gran mayoría. Tampoco les importa a la industria alimentaria que comamos más sano o menos, lo que les importa son sus beneficios, como a cualquier hilo del otro lado del capitalismo en el que estamos nosotros. Yo soy multimillonario y vivo mi vida disfrutando (dudoso.... pero en fin) de mis millones, de mis tres mansiones impresionantes, de mis 10 coches de lujo... mientras la empresa gracias a la que disfruto de todo eso sigue contribuyendo a acelerar la desglaciación, a  aumentar la diferencia entre ricos y pobres, a generar pobreza... Los demás que se busquen la vida, y los que vengan después que lidien con sus propios problemas.

Carpe diem. Una bendición para el ego. La maldición de la humanidad.

Creo que tendré más cuidado de ahora en adelante al utilizar esta expresión.

sábado, 9 de marzo de 2013

Primera imagen de Anagennese

Muy fresca os traigo la imagen de portada de Anagennese que, como podéis ver, sigue la línea iniciada con la última edición de En algún lugar de Orión. ¿Qué os parece?  Como regalito también os muestro algunas de las trece ilustraciones que encontraréis en esta segunda entrega. Por supuesto, todo ello de Urban Breznik. En breve, más noticias.





jueves, 7 de marzo de 2013

Maquetando Anagennese

Tanto retraso que esto ya parece la espera para Diablo III.

Como comentaba en algún lugar del que no recuerdo, Anagennese está en maquetación. Si lo digo así casi suena como si estuviese en una rotativa gigantesca con tres maquetadores profesionales trabajando a destajo.
La realidad es quizá menos impresionante pero más romántica. Los maquetadores no somos otros que Urban y yo misma, que a este paso nos vamos a volver casi profesionales en el tema. Aprovechando que ahora mismo él es quien tiene todo el peso del libro y yo puedo tomarme un respiro, pensé que sería interesante explicaros un poco en qué consiste la maquetación del libro y porqué toma tanto tiempo.

En primer lugar, maquetar el libro consiste en preparar el texto visualmente para su reproducción, ya sea en papel o en formato digital. El texto, por tanto, ha de estar ya terminado, revisado y corregido ortográficamente cuando llega a maquetación.

Esta fase, aunque parece que por ser la última es quizá la menos importante, es crucial para que un libro funcione bien. ¿Porqué? Porque es la fase en la que realmente se piensa en el lector.
Hoy en día creo que muchos escritores escriben pensando en lo que le gustará al comprador, y ojo que digo comprador y no lector, ya que este tipo de escritores y editores ven al cliente como eso: 20 euros más para la saca.

Sin embargo algunos de nosotros todavía escribimos pensando en lo que a nosotros nos apetece escribir. Los correctores piensan en la lengua. Los maquetadores, sin embargo, piensan en vosotros. ¿Qué es lo mejor para los lectores? ¿Qué tipografía les resultará más cómoda? ¿Qué tamaño de letra?
Si utilizas un tamaño de letra demasiado grande, además de parecer un libro infantil, el número de páginas se disparará lo que no sólo aumentará los costes sino que disminuirá la maniobrabilidad del libro.  Si utilizas una tipografía demasiado complicada, los ojos deberán hacer el doble de esfuerzo al entender lo escrito, por lo que la vista se agotará y las posibilidades de que tus lectores abandonen el libro simplemente por el dolor de cabeza que les produce leerlo serán preocupantes.
Otro tema a tener en cuenta son los márgenes. Cuando abrimos un libro bien maquetado nos da la sensación de que el texto está exactamente en el medio. Si os fijáis bien, os daréis cuenta de que no es así. Especialmente en libros gruesos, el encuadernado se lleva un porcentaje del papel a la hora de abrirlo, y si no damos más margen interior corremos el riesgo de que el texto acabe tan pegado al borde que nos resulte difícil de leer. Por otro lado, también necesitamos el suficiente margen en el lado exterior para poder sujetar el libro con el pulgar sin que cubramos con él una parte del texto.

¿Dónde separar textos? ¿Cómo indicar al lector cuando hay un cambio de escena, un cambio de narrador o un cambio de punto de vista? ¿Cómo remarcar textos dentro del texto (artículos de un diario, un párrafo de un texto que el personaje está leyendo...) ?
Anotaciones al pie de página, ilustraciones bien posicionadas, un índice cuidado... son muchos los detalles a tener en cuenta. Detalles que en ocasiones nos obligan a ir página por página. Y eso, en un libro de 600 páginas, puede ralentizar bastante el proceso.

Maquetar para ebook es otro mundo en el que acabamos de sumergirnos como auténticos novatos. Muchos piensan que no tienes más que exportar en pdf y darle a la varita mágica de los conversores. Bien... si no te preocupa mucho y lo único que quieres es publicar ya y ahorrarte tiempo, siempre puedes hacerlo.
Ahora bien, si te preocupa hacer una buena edición, con cambios de tamaño adecuados, donde todo esté en su posición, un buen índice que funcione, etc.... la cosa cambia.
Amazon ha lanzado un nuevo plug-in para in-Design que ayuda bastante, pero tampoco hace milagros.

No quiero aburriros más con cosas de diseñadores y maquetadores, ya que al fin y al cabo lo que a vosotros os interesa es el libro. Esta tarde nos toca pelearnos con el ebook, ya que la versión para imprenta está prácticamente lista.

Digamos que Anagennese está ya gratinándose.